domingo, 23 de enero de 2011

Elena González Urbaneja


Si tú de verdad buscarme quisieras,
me hubieras buscado por dentro
y no por fuera.

*

Sé que un año nos separa,
y ojalá no te importara.
De todos modos aquí estaré,
sin nada mejor que hacer, te esperaré.
Porque nunca olvidarte podré.

*

Ojalá conquistarte yo pudiera,
mas ya no te quiero,
pues de esa chica te enamoraste
y a mí ni me miraste.

*

Todos los días al parque yo bajaba
y al balcón buscándote me asomaba;
pero nunca te veía y, pensativa,
yo me preguntaba: "¿dónde estarás?".
Al balcón me asomaba
y desesperada te buscaba.

*

Si yo a tu lado estuviera,
alegre yo estaría.
Si yo contigo estuviera,
la más felíz yo sería.

*

Como que adorarte, sabes que te adoro.
Como que quererte, sabes que te quiero.
Como que saber, lo sabes todo.
Todo sobre mí, todo, excepto:
Cuánto te adoro y cuánto te quiero.
Y con esto, te lo demuestro.

(Elena González Urbaneja, 1ºESO-G)

martes, 18 de enero de 2011

EL AMA DE CASA DESPRECIADA

Para algunas personas, hablar y ofender es lo mismo.

Violeta está en el mercado. Se pasea por los puestos de alimentos eligiendo los mejores productos, pero no los mas caros para la comida del día.

En casa los cocina con esmero, pues a su compañero le gustan las comidas como las de antes. Limpia la casa, arregla la ropa y la coloca en su sitio, porque así se encuentran rápido las prendas.        

Su compañero sale del trabajo y, muy a menudo, se encuentra a algún conocido y se van al bar a tomar unas tapas. Luego va  a casa, la mesa está puesta, se lava las manos, comienza a comer, pero replica:

—Esto está asqueroso, no sabes cocinar, a ver cuándo preparas algo en condiciones.

¡Claro! Como ya no tiene hambre, le desprecia la comida.

Luego se quiere cambiar de ropa pero sin molestarse en buscar las prendas planchadas y colgadas, y replica:
       
—¿Donde está mi ropa? ¡No la encuentro! ¡No sirves para nada! ¡No sé qué haces todo el día aquí!
      
Violeta está triste, nunca recibe un beso, su compañero no  la acompaña a pasear y nunca se acuerda de su cumpleaños. Le gustaría que le dijera algún día: qué buena está la comida, gracias por lavarme la ropa, hoy te invito a cenar, ¿cómo te encuentras hoy?…

O simplemente…

Te quiero.
                                                         (Alejandro González  Meléndez)

sábado, 15 de enero de 2011

CÓMO QUIERES

Cómo quieres que te quiera
si yo no quiero,
cómo quieres que te haga feliz
si no puedo...
Cómo puedo dejarte
sin hacerte daño,
Cómo olvidar
todo lo ocurrido...
Siento si te he herido,
siento si has llorado,
pero no puedo estar contigo
porque lo amo...

Miryam Ramírez, 3ºESO C